(Niños
y niñas,
hay que desconfiar
de lo que digan
las
habladurías)
Es
mi amiga Rosa
una
mantis religiosa
que
es cualquier cosa
menos
religiosa.
Puede
ser hermosa,
puede
ser graciosa,
cualquier
otra cosa
menos
religiosa.
Va
poco a misa
porque
tiene prisa,
y no reza el rosario
en
ningún horario.
En
ninguna ocasión
rezó
una oración,
con
su amiga la pulga.
Por
eso tiene mala fama,
tanto
que es un drama.
Fama
de mujer fatal
que
va sembrando el mal.
Dicen
las habladurías
que
todos los días
busca
un pretendiente
para
hincarle el diente.
Pero
son todo chismes,
miserables
y tristes.
Tiene
un gran corazón
que
está lleno
de amor.
Mi
amiga Rosa,
la
mantis religiosa,
es
cualquier cosa
menos
monstruosa.
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